Para cuando leas esto seguramente sepas que mi memoria no es algo de lo que me enorgullezca, pero voy a tratar de resumir los ultimo nueve años.
Conocí a tu mamá en la universidad, y me enamoré de ella desde el primer momento. Cuando terminé de estudiar decidimos venir a vivir a Buenos Aires, estuvimos casi un años en una pensión donde teníamos una habitación para nosotros y una cocina que compartíamos con todos (y casi nunca usábamos). Después de eso nos mudamos a un departamento de dos ambientes, que nos parecía tan grande que los primeros días nos costaba encontrarnos. Esa fue la señal que las abuelas, vecinos, parientes, amigos y conocidos estaban esperando para empezar a preguntarnos por vos.
En abril del 2010 llegó Gaia, la perra mas mañosa e inteligente que tu mamá y yo pudimos (mal)criar, y fue cuando nos dimos cuenta que realmente queríamos ser padres.
Nos mudamos a un departamento mas grande, con una habitación mas, desde la que en este momento estoy escribiendo esto, porque queríamos tener todo listo para cuando quisieras venir. Y viniste...